Cómo convertir un coche a GLP: te contamos todo

¿Tienes un coche que gasta demasiado combustible? Quizá te compraste ese SUV con la promesa de que iba a consumir 7 litros de gasolina cada 100 km, pero la realidad es que necesita 11. Si este es tu caso, puedes ahorrar mucho dinero al convertir tu coche a GLP.

El GLP o gas licuado del petróleo es una solución para aquellos que se inquietan por el consumo, profesionales del transporte y para los que se preocupan por el medio ambiente, puesto que contamina menos y el precio del GLP es más económico.

El proceso de conversión a GLP: cómo se hace

A la hora de convertir un coche a GLP hay que seguir una serie de pasos sencillos, pero que tienen que llevarse a cabo en un taller especializado.

Evaluación técnica

Lo primero que se hace es una evaluación técnica. De ese modo, cuando llevas tu coche al taller, los especialistas ven si puedes convertir tu coche a GLP. Si la respuesta es afirmativa, comienzan con el proceso de conversión.

Instalan todos los elementos necesarios

Resumiendo, para que tu coche funcione con GLP va a necesitar varios elementos:

• Tanque de GLP. Ya hablamos aquí de los tanques de GLP. Te lo pondrán en el maletero o en la zona de la rueda de repuesto. Su capacidad va a depender de cómo es tu coche.
• Sistema de inyección y reguladores. Son los encargados de llevar el gas al motor de forma correcta y en la cantidad adecuada.
• Conductos y válvulas de seguridad. Con el fin de que no haya ningún problema, se ponen unos conductos específicos para el gas y unas válvulas de seguridad por donde puede escapar en caso necesario.

Pruebas de funcionamiento

Ya con el sistema montado, los profesionales del taller hacen pruebas de funcionamiento. Así ven si todo es correcto o tienen que ajustar la inyección del gas o cualquier otro parámetro.

Beneficios de convertir tu coche a GLP

Los beneficios de pasar tu coche a GLP son múltiples. De hecho, cada vez son más los conductores que optan por hacer la conversión.

Ahorro económico

La principal razón para que un coche funcione con GLP es el ahorro económico. El vehículo gasta más litros de GLP que de gasolina para recorrer 100 km, pero el coste del litro de GLP es más bajo que el de gasolina.

Contamina menos que la gasolina y el gasoil

Muchas personas se preocupan por el medioambiente, de manera que pasan su coche a GLP con la idea de contaminar menos.

El GLP no deja de ser un gas que se quema a la hora de producir energía, pero posee menos emisiones de CO₂, NOX y partículas contaminantes que el diésel y la gasolina.

Se puede obtener la etiqueta ECO

Otra razón de peso para pasar por un taller de conversión a GLP es la obtención de la etiqueta ECO, la cual permite circular por las zonas ZBE de las ciudades.

¿Tienes un coche con muchos años a sus espaldas? Si este es tu caso, pregunta si lo puedes pasar a GLP. Gracias a ello podrás obtener la etiqueta ECO dependiendo del año de matriculación.

Qué coches se pueden convertir a GLP

No todos los coches se pueden convertir a GLP, ya que tienen que cumplir una serie de requisitos dependiendo del combustible con el que funcione.

Coches con motores de gasolina

Para pasar tu coche de gasolina a GLP, este debe estar matriculado a partir del año 2001 y aprobar la normativa EURO 3. Además, si está matriculado del año 2006 en adelante, al convertirlo te darán la etiqueta ECO.

Coches con motores diésel

¿Se puede convertir un coche diésel a GLP? La respuesta es que sí, pero como ocurre con los de gasolina, hay que cumplir una serie de condiciones.

¿Qué coches diésel se pueden convertir a GLP? Son aquellos matriculados a partir de 2006 y que cumplan con la norma EURO 4. Si se ha matriculado a partir de 2015, la conversión lleva aparejada la obtención de la etiqueta ECO de la DGT.

Coste de la conversión a GLP: ¿merece la pena?

Viendo todas las ventajas que se obtienen con el GLP, es normal que te preguntes cuánto cuesta convertir un coche a GLP. El importe va de los 1000 a los 3000 euros, dependiendo del vehículo que tengas, el kit de conversión, la necesidad de mano de obra, etc.

Es más barato en los coches de gasolina, mientras que la transformación es más compleja y cara en los diésel. De esta manera, la amortización se da entre los 25 000 y los 50 000 km, por lo que sí merece la pena tanto en los coches de gasolina como en aquellos con motor diésel que hagan muchos km al año.

Además, no hay que olvidar la posibilidad de obtener la etiqueta ECO, lo cual te va a librar de problemas en los próximos años.

Convertir el coche a GLP es una buena decisión, pues el ahorro económico es notable. A este ahorro también contribuyen unas ruedas de calidad, por lo que te animamos a que adquieras algunos de nuestros neumáticos que ayudan a rebajar el consumo de combustible.